sábado, 4 de enero de 2014

Demostrar significa querer con los labios

A veces las cosas no salen como uno quiere. Menos aún como uno las imagina. Es tiempo de soñar, soñar despierto, soñar dormido, tener metas que cumplir, perseguir deseos. No darles descanso, y si rienda suelta a los sentidos.
No la querías lo suficiente si permitiste que se fuera, ¿donde quedan aquellas madrugadas en las que sólo necesitabas verla?
Parece que te gusta mentirte a ti mismo, y aquí la única que dice la verdad es ella. Es ella a la que le encanta imaginar una sonrisa en tus labios cuando abres los ojos, por eso te despierta cada mañana, es ella la que se empeña en mejorar las cosas incluso cuando no hace falta. Pero no es a ella, es a ti al único al que engañas. Ella sabe que la quieres, quizá demasiado. Que pierdes la cabeza por sus ojos, que con sólo decirte que te quiere hace que quieras abrazarla, sin embargo ella se calla. Claro que siente, claro que pasa. Ella que tantas veces ha dejado las oportunidades por ti alegando que tu eres la más importante de su vida. Y le dices que no, pero ¿no a que?  Ella no te ha pedido nada, solamente te dijo la verdad.


2 comentarios:

Rubén Ortiz dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Caracola dijo...

Pelos de punta. No podía ser más él y yo. Precioso